Una habitación llena de cosas…
Días sin poder lavarme estas manchas de conciencia que impregnan mi piel. Los olores y los sabores han sido remplazados por expresiones incoloras dentro de mi boca, y a pesar de que las ventanas están abiertas, no hay aire que circule por esta habitación. Me he resistido ya durante muchos días a abrir la puerta resguardada por un ave de color negro, que solo me observa atento a mis movimientos, pero nunca me cuestiona ni me habla, eso me vuelve…